Nuevas formas de organización profesional en el Cono Sur: La autogestión solución o alternativa para recuperar puestos de trabajo

AutorMaría Del Luján Charrutti Garcén
CargoDoctora en Derecho y Ciencias Sociales
Páginas585-600
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Nuevas formas de organización profesional
en el Cono Sur: La autogestión solución
o alternativa para recuperar puestos de trabajo
María del Luján Charrutti Garcén
Doctora en Derecho y Ciencias Sociales
Sumario:
A. Introducción.
B. Breve descripción de los antecedentes políticos,
económicos y sociales que dieron inicio al proceso de
recuperación de empresas.
C. Particularidades en los procesos de recuperación de
empresas en el Uruguay mediante el sistema cooperativo.
D. Características de la nueva legislación de Uruguay en
materia de cooperativas de trabajo. Conclusiones.
Breve síntesis
Dejar la empresa a quienes la trabajan parece ser una de las nuevas formas
de organización profesional del siglo XXI. La autogestión si bien data de mucho
tiempo atrás ha sido la solución o única alternativa en algunos sectores
productivos del cono sur para resolver el problema del cierre masivo de empresas
en quiebra.
No solo las empresas poco rentables o a punto de extinguirse optan
mundialmente por el sistema cooperativo, sino que algunos modelos europeos
ya optan por la autogestión
La implicación de los integrantes de la cooperativa es fundamental, si bien
la normativa es generalmente flexible y cualquier empresa podría transformarse
en una cooperativa, el proyecto cooperativo debe ser viable, y para eso no solo
debe contar con el apoyo del gobierno nacional y local sino que hay que pensar
en otro factor determinante, y cada vez de mayor importancia: el reciclaje de
trabajadores, la formación profesional, la formación continua, todo lo cual
fortalecerá la rentabilidad de la empresa cooperativa.
4to. Congreso Internacional de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. Memorias y Comunicaciones
Revista Derecho del Trabajo n° 9/2010 (extraordinario) 585-600
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El sistema cooperativo como figura jurídica ha sido un instrumento eficaz
para la recuperación de puestos de trabajos perdidos en Latinoamérica, como
consecuencia del desempleo masivo de trabajadores de ciertos sectores
económicos o cierre de empresas de gran envergadura para el desarrollo
productivo de estos países.
La figura del sindicato ha sido por más destacable y nos referiremos más
adelante en los casos expuestos, dado que los procesos de recuperación de
empresas en algunos casos han surgido como producto de la lucha sindical
por no perder puestos de trabajo y en otros la figura de la organización gremial
ha sido la protagonista singular con la ocupación de los lugares de trabajo, es
decir sin organización sindical nada habría sido posible.
A) Introducción
1. La autogestión.
Dejar la empresa a quienes la trabajan parece ser una de las nuevas formas
de organización profesional del siglo XXI. La autogestión si bien data de mucho
tiempo atrás ha sido la solución o única alternativa en algunos sectores
productivos del cono sur para resolver el problema del cierre masivo de empresas
en quiebra.
Sabido es que el sistema cooperativo era mirado con cierto recelo dado
que era utilizado por aquellas empresas que preferían tercerizar y transformar
algún sector productivo en cooperativas de trabajadores, que no era más que
cooperativas de fachada, las cuales servían por tanto para disimular una situación
fraudulenta. Así sucedía en Uruguay por ejemplo en el sector pesquero, donde
el armador externalizaba a sus trabajadores a través de una plantilla de una
cooperativa, teniendo por ende una ventaja para el empresario de reducir sus
costos laborales y fiscales, todo lo cual era favorecido por la normativa laboral
de la época. Hoy ese mito ha desaparecido, la nueva legislación en materia de
descentralización empresarial y la nueva legislación sobre cooperativas de trabajo
han revertido esta situación, lo cual desestimula este tipo de negocios
fraudulentos.
Pero no solo las empresas poco rentables o a punto de extinguirse optan
mundialmente por el sistema cooperativo, sino que algunos modelos europeos
ya optan por la autogestión Los cooperativistas francesas vienen trabajando
desde hace años con la idea de transformar una gran cantidad de empresas
sanas en cooperativas de trabajo, un estudio realizado en el año 2007 calcula
que existían en Francia unas 70 mil empresas cuyos dueños hasta finales de
2010 estarían en edad de jubilarse y se estima que un 10% podrían no tener
sucesores1, con lo cual una persona que se jubila y no tiene sucesores puede
vender la empresa a quienes la trabajan y conocen.
María del Luj án Charrut ti Garcén
1www. scop.coop.

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